A menudo confundido con el simple cansancio, el síndrome de fatiga crónica (SFC) es una condición compleja y debilitante que afecta a millones de personas en todo el mundo. Pero, ¿qué ocurre realmente en el cuerpo de quienes padecen esta enfermedad?

¿Qué es el síndrome de fatiga crónica?

El síndrome de fatiga crónica, también conocido como encefalomielitis miálgica, es una enfermedad compleja y debilitante caracterizada por una fatiga extrema que no mejora con el descanso y empeora con la actividad física o mental. No es simplemente «estar cansado»; es una condición médica seria que afecta múltiples sistemas del cuerpo.

Síntomas principales

Uno de los primeros pasos para entender el síndrome de fatiga crónica es reconocer sus síntomas. A diferencia de la fatiga regular que todos experimentamos, el cansancio asociado al SFC no mejora con el descanso y puede empeorar con la actividad física o mental. Pero, ¿hay más que solo cansancio en esta condición? Los pacientes con SFC pueden experimentar una variedad de síntomas, incluyendo:

  • Dolor muscular y en las articulaciones.
  • Dificultades de concentración y problemas de memoria.
  • Dolores de cabeza persistentes.
  • Sensibilidad a la luz y al ruido.
  • Problemas de sueño.
  • Extrema agotamiento después de esfuerzos físicos.

Estos síntomas pueden variar de un día a otro y no son exclusivos del SFC, lo que a veces dificulta su diagnóstico.

Diferencia entre fibromialgia y fatiga crónica

Aunque el SFC y la fibromialgia comparten algunos síntomas como el dolor y la fatiga, existen diferencias clave:

  • La fibromialgia se caracteriza principalmente por dolor crónico en todo el cuerpo.
  • El SFC se define principalmente por la fatiga debilitante.

Ambas condiciones requieren estrategias de manejo específicas y adaptadas a las necesidades del paciente.

¿Quiénes sufren del síndrome de fatiga crónica?

Aunque el SFC puede afectar a cualquier persona, es más común en mujeres de entre 30 y 50 años. La condición no discrimina por edad o género, pero ciertos grupos demográficos muestran una prevalencia más alta.

Encefalomielitis mialgica: ¿Es lo mismo que el SFC?

El término encefalomielitis mialgica (EM) se usa a menudo de manera intercambiable con SFC, pero se enfoca más en los aspectos neurológicos de la enfermedad. Los investigadores y médicos están trabajando para entender las sutiles diferencias entre EM y SFC, lo que es fundamental para el diagnóstico y tratamiento adecuados.

Tratamientos comunes

Afrontar el SFC puede parecer desalentador, dada su naturaleza crónica y los variados síntomas. Sin embargo, existen estrategias que pueden ayudar a manejar la condición:

  • Manejo del sueño: Técnicas de higiene del sueño pueden ser cruciales.
  • Ejercicio moderado: Actividades como la fisioterapia suave pueden mejorar los síntomas sin causar más fatiga.
  • Dietas balanceadas: Mantener una nutrición adecuada es clave.
  • Técnicas de relajación: Métodos como la meditación o yoga pueden ayudar a manejar el estrés, que a menudo empeora los síntomas.
  • Asesoramiento psicológico: Estrategias para manejar el estrés y ajustar las expectativas pueden mejorar la calidad de vida.
  • Medicamentos: Algunos medicamentos pueden ser recetados para controlar el dolor, el sueño y otros síntomas específicos.

Particularmente, la fisioterapia puede jugar un rol esencial, ayudando a los pacientes a mantener la movilidad y a manejar el dolor sin sobrecargar el cuerpo.

NUEVOS PROYECTOS TERRITORIALES PARA EL REEQUILIBRIO Y LA EQUIDAD, EMPRENDIMIENTO Y MICROEMPRESAS

LÍNEA 6: TRANSICIÓN DEL TRABAJO AUTÓNOMO Y DE LA ECONOMÍA SOCIAL HACIA UNA ECONOMÍA VERDE Y DIGITAL

Nombre de la entidad: Susana Domínguez Peregrina

EXPTE. Nº: MRR222022SC000001161

Pedir Cita WhatsApp